La película japonesa “El verano de Kikujiro”, está contada desde el punto de vista del niño Masao, en el cual se mezcla la realidad con los sueños en capítulos, como si fuera un diario en el que escribe día a día de sus vacaciones.
Masao es un niño de nueve años, el cual, tiene que pasar sus vacaciones de verano con su abuela. En sus vacaciones se propone a buscar a su madre que lo había abandonado, que sólo conocía por una foto y que sólo tenía una dirección para poder encontrarla. Va en su búsqueda junto con el esposo de una amiga de su abuela. Durante el transcurso de ese viaje surgen sonrisas, lágrimas, angustia y realidad.
Al principio a Kikujiro no le importaba Masao, el chico, y lo trataba mal, pero a medida que fueron pasando los días, los dos desconocidos terminaron siendo muy unidos, con una relación casi de padre e hijo por todas las cosas que habían vivido juntos y el cariño que se tenían.
La película me pareció muy original, ya que nunca había visto alguna similar. Está muy buena y entretenida. En algunas ocasiones es triste, y en otras, muy cómica, no podés evitar reírte y es muy recomendable.
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